Las cajas eléctricas tienen múltiples aplicaciones, ya que se utilizan para conectar segmentos de tuberías, albergar las conexiones entre los conductores de la instalación, resguardar los conductos de paso y bifurcación, proteger las uniones y conexiones, y garantizar la accesibilidad necesaria. Estas cajas se emplean en diversas situaciones, como salidas para dispositivos como luces, interruptores y tomacorrientes, para proporcionar puntos de paso, como gabinetes y también para fines de desconexión.